“Dicen que hay del orden de 700.000 especies de insectos que pasan por el estado de pupa, que a veces se llama crisálida, antes de desplegarse y volar. Nacen para vivir volando, pero sin alas para volar, y han de tomarse su tiempo: se fabrican una cápsula, se encierran en ella como en un mundo misterioso y mágico, se transforman dentro lentamente, brotan las alas y crecen primorosamente dibujadas, sienten la llamada irresistible del aire y de las flores, y saben que es su momento: “Nací para volar, nací para las flores”.
Entonces se deciden y rompen su cápsula de oro (“crisálida” viene del griego chrysos que significa “oro”), se desprenden de ella como si no fuera más que un peso muerto, y se echan a volar. La vida en metamorfosis.”
Corrent temps difícils... no creus que ja portem massa temps dins del capoll?
ResponEliminaGràcies, una bona reflexió en els temps que corren.
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